No sólo importa lo que aprendes sino cómo lo aprendes
Estamos en un momento de grandes cambios constantes con una imparable evolución tecnológica que hace que el esquema del mercado laboral se tambalee. Muchos de los trabajos que había hace 20 años, ahora ya no existen. Aunque, al mismo tiempo se crean de nuevos. Estos cambios implican que hay que actuar en la base de la educación. Es decir, no se trata de educar en base a las necesidades de las empresas, porque éstas también están cambiando. Lo que se busca hoy en día es que los alumnos y alumnas adquieran no sólo contenidos, sino competencias que les permitan adaptarse a cualquier tipo de situación.
El desarrollo de una personalidad orientada al aprendizaje continuado debe ser un objetivo, ya que las personas del futuro estarán preparadas para abordar los cambios continuados que sucedan. El concepto de aprender a aprender va más allá del saber hacer. Abarca una serie de procesos cognitivos y afectivos que deben empezar a desarrollarse desde la etapa escolar.
¿Cómo aprender?
¡Coge tu libreta Escolofi y apunta estas 5 ideas sobre cómo aprender a aprender, ya que no sólo importa lo que aprendes sino cómo lo aprendes!
¿Cómo puedes aprender a aprender?
1. Planifica
Primero de todo, deberás planificar tu aprendizaje, es decir, analizar cómo llevarás a cabo las tareas. Pregúntate ¿cuáles son tus objetivos? De esta manera evitarás sentirte perdido ya que sabrás perfectamente qué quieres alcanzar y cómo lo tienes que hacer.
2. Motivación
La motivación es clave para el aprendizaje. En el ámbito de la educación se refiere a factores que incitan a los alumnos a prestar atención. Es decir, que estén interesados en preguntar y aclarar dudas que se les presentan durante el proceso de aprendizaje. ¡Búscale un sentido al temario que estás estudiando! Si lo tienes que aprender seguro que tiene alguna utilidad en tu vida diaria.
3. Técnicas de aprendizaje
Te resultará muy útil a la hora de estudiar utilizar varias técnicas de aprendizaje para facilitar y acelerar el procesamiento de la información. Por ejemplo, para el proceso de memorización, puedes utilizar las reglas mnemotécnicas, las cuales se tratan de técnicas para recordar conceptos de manera más fácil. Si quieres saber más sobre técnicas de estudio no olvides consultar nuestro anterior artículo sobre “10 técnicas de estudio para aprobarlo todo”.
4. Colabora
Cuando realices una tarea en grupo será más sencillo detectar errores propios o incluso de tus compañeros y ¡aprender de ello! Una buena idea es la puesta en común de los apuntes. Cada persona toma apuntes de manera diferente y da más importancia a unas cosas u otras. De esta manera, todos os podréis beneficiar ya que podréis completar el temario con lo que han escrito los demás compañeros.
5. Aprendizaje significativo
El aprendizaje significativo no se olvida y se mantiene en las capacidades del alumno. La base de este proceso es que deberás ser responsable de tu propio aprendizaje y desarrollar un papel activo y participativo.
Este tipo de aprendizaje está relacionado con los conocimientos previos y supone una manera de complementar los esquemas o representaciones de la realidad logrando un aprendizaje profundo. No son simplemente datos memorizados, sino que se trata de un marco conceptual acerca de cómo interpreta cada uno la realidad que le rodea. Por lo tanto, cuando desarrolles un buen aprendizaje significativo verás cómo encajan todos los conceptos, ideas, teorías, fórmulas o razonamientos que has estudiado.
¡No sólo importan los contenidos que aprendes o cuánto sabes sobre algo, sino qué eres capaz de hacer con lo que sabes!